Cómo hacer que una mamada sea más picante en 5 sencillos pasos
¿Cómo está tu cabeza? No...literalmente. Hoy estamos aquí para hablar de uno de los trabajos más importantes que tendrás en tu vida: mamar. Ya seas un profesional, un intermedio o un novato, estos consejos te harán volar la cabeza (y su carga).
Fuego y hielo
No, no estoy hablando de Juego de tronos, cariño. Estoy hablando de agregar algo de temperatura a ese palo. Primero lo primero, haz que tu hombre preste toda su atención. Luego, ponte un cubo de hielo en la boca y muévelo hasta que tu lengua esté más fría que una tormenta de hielo en la Patagonia: tu boca helada será refrescante para su virilidad y él se excitará con la sensación energizante.
Después, toma una taza de agua o té caliente, agítala un momento antes de escupirla (o tragarla) y pon tus labios en…bueno, adivina. El repentino cambio de temperatura lo volverá loco. Repite el ciclo de frío y calor una y otra vez y en pocos minutos deberías tener una explosión termodinámica en las manos, o en la boca, o…donde sea.
Cama, mamada y más
Garganta Profunda no era sólo una fuente anónima del escándalo Watergate, también es una técnica para mamar que requiere delicadeza, fuerza y cero reflejo de nauseas. Si eres capaz de tragarte el miembro viril de alguien, ¡tengo una técnica para ti! Acuéstate en la cama con la cabeza colgando del borde y haz que tu hombre entre en tu boca y te rellene la cara repetidamente como si estuviera taladrando huecos en la pared para su póster enmarcado de Britney Blackout. La forma en que estás posicionado hará que te resulte más fácil aguantar los centímetros, y a él le excitará muchísimo ponerse encima y darte de comer.
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Próstata de la unión
Mientras se lo chupas a tu hombre, tócalo suavemente con un estimulador de próstata para intensificar su experiencia. Muchos hombres gays olvidan el agujero cuando se ponen a trabajar en la barra, pero el sexo oral sin un poco de juego anal es una oportunidad perdida. Lo entiendo, a veces los juguetes se olvidan, ¿recuerdas a Jessie en Toy Story 2? Pero agregar el juego anal a tus mamadas eleva toda la experiencia: pasa de ser un trabajo a una verdadera carrera.
Reconocimiento facial
Últimamente me he dado cuenta de que los tratamientos faciales no son tan populares en mis sitios favoritos como antes. Tragar es sexy, sin duda, pero la limpieza de cutis es una obra maestra del sexo oral y merece un renacimiento. La acabada facial es divertida, llena de dramatismo y siempre aporta un toque de perversión teatral al dormitorio. La próxima vez que se la estés chupando a tu pareja, dile que te gustaría que acabara en tu cara y verás cómo sonríe.
Dominio público
Cabalgar en una cama es uno de los mayores placeres de la vida, pero seamos sinceros, puede ser un poco repetitivo semana tras semana. Intenta la mamada en público. Ahora bien, este camino no es para los débiles de corazón, pero definitivamente hará que la sangre de tu hombre bombee. No digo que tengas que llevar a tu hombre al centro de la ciudad, pero si te atreves, hazlo. Para los que busquen una experiencia más fuera del ojo público, vayan a algún lugar donde no les pillen y sirvan cara a cara a su hombre. Algunos sitios para probar: un callejón, un vestuario, un sendero, un carro o incluso un jardín local.